«Hay una canción que me siento muy orgulloso de haberla escrito y se llama: “Y sin embargo”.
Es curioso porque yo creía que como habla de un tío que va con la mujer a la que ama por la calle, pero en realidad va mirándole el culo a otras y loco por escaparse con cualquiera, pues iba a cabrear mucho a las mujeres. La primera vez que se la puse a una mujer me dijo: “eres un cabrón”. Le pregunté ¿por qué? y me dijo: “a mí me pasa lo mismo.
¡Ellas van por la calle mirando el culo de otros! ¡Y en los conciertos, las tías están encantadas con la canción!».